La ciencia es la progresiva aproximación del hombre al mundo real.
Marx Planck (físico alemán)

El domingo pasado nos fuimos de excursión. Hace mucho que quería ir al CosmoCaixa (antes conocido como el Museo de la Ciencia), pero lo habíamos ido posponiendo porque los niños eran demasiado pequeños. Es un museo al que me encanta ir y estaba deseando llevar a mis hijos. Además, todavía no había podido disfrutar de los cambios que se habían hecho hace unos años, entre ellos la reproducción de un bosque inundado.

Aprovechando que en Barcelona la entrada a los museos es gratis los primeros domingo de mes, nos fuimos hasta allí. Aquello estaba a reventar, había sobretodo muchas familias con niños, y nos costó encontrar aparcamiento. Una vez dentro, aunque había mucha gente, tampoco estaba abarrotado (suerte que aquello es enorme). Decidimos dar una vuelta por las diferentes plataformas para que los niños fuesen viendo un poco el museo y pudiesen tocar las cosas. Esto es lo mejor del museo: poder tocar las cosas, sobretodo para los niños; ¡aunque los míos todavía son muy pequeños para entender la ciencia! Todo mejor de lo esperado, puesto que la niña estaba entretenida y el niño emocionadísimo. También fuimos a ver el bosque inundado, que les gustó mucho ya que pudieron ver peces, tortugas y patos. Es increíble lo que han hecho allí.

Dejamos para el final el recorrido por la exposición de los dinosaurios. Es una colección procedente del desierto del Gobi, con varios esqueletos completos (entre ellos de T-Rex, impresionante) y otros parciales, junto otros restos fósiles como huevos. Aunque era difícil para un niño de 4 años comprender que eran animales que existieron hace millones de años, quedó impresionado sobretodo por el tamaño.

Y cómo ya era la hora de comer y nos lo habíamos pasado tan bien, nos fuimos a comer unas hamburguesas. Ha sido una buena experiencia, y espero que podamos repetir en breve (sobretodo que mi marido se anime más a menudo para salir con los peques).