La posibilidad de realizar un sueño es lo que hace que la vida sea interesante.
Paulo Coelho (escritor brasileño)

Nomelopuedocreer, nomelopuedocreer, nomelopuedo creer… Así, todo junto, es la musiquilla que suena en mi cabeza durante todo el día.

Mi marido, una vez más, ha hecho realidad uno de mis sueños. Y yo no me lo puedo creer…

Hace muchos años que me emociona el tema de la fotografía. Sólo de lejos, ya que nunca ha habido posibles para agenciarme una cámara medio decente. Así que comencé a hacer una hucha para algún día poder comprarme una reflex en condiciones. Últimamente se me cae mucho la baba porque, pese a la crisis, la gente aparece con una cámara reflex cuando menos te lo esperas. Y mi hucha se iba llenando, y yo le iba pegando tiritos a mi marido… Pero este diciembre nos surgió la oportunidad de comprar un parking con trastero (muy, pero que muy codiciados en mi comunidad) y tuvimos que sacar todos nuestros ahorros, incluso los de mi hucha.

Cuando ya tocaba mi sueño con la punta de los dedos, se esfumó. Es bien cierto que el dinero no da la felicidad, pero lo que ayuda… En fin, que ya me había resignado a pasarme unos años más soñando, hasta que el otro día, tras ver una oferta bastante buena (y después de saber que Hacienda nos devolverá un pico), me metió en el coche para ir a comprar la reflex. Yo pensaba que era una broma, y ni siquiera salí del coche… pero sí, volvió con la anhelada cámara para que dejase de soñar despierta.

Llevo un par de días oyendo en mi cabeza el «nomelopuedocreer», pero tendré que empezar a creérmelo e ir despertando las neuronas para sacarle partido a mi capricho.